Mientras regresan a la Kame-House, Krilin ve la luna artificial en la distancia y comienza a temblar, recordando las transformaciones del Goku en mono. Al sentir el aumento de poder de Vegeta, Gohan se preocupa por su padre y elige volver para ayudarle. Incapaz de detener a Gohan, Krilin también regresa. De vuelta en el campo de batalla, Goku hace todo lo posible contra el Mono Vegeta. Sin embargo, Vegeta es increíblemente rápido y ágil para su tamaño, así como diez veces más fuerte que en su estado de forma anterior, y Goku comienza a perder su energía. Durante la persecución, Goku pronto se da cuenta de que él mismo era el terrible monstruo de la luna llena del que su abuelo le habló hace muchos años, así como el que lo mató durante un alboroto sin sentido. Dejando a un lado sus sentimientos de culpa, Goku se prepara para vengarse de Vegeta.
Mientras tanto, de vuelta en Kame-House, la bruja Baba logra consigue finalmente visualizar la batalla en su bola de cristal.
Goku se prepara para crear una “Gekin-dama”. Para ganar el tiempo que necesita para concentrarse, utiliza la técnica “Bengala solar” para cegar temporalmente a Vegeta, y luego vuela a una distancia segura. Una vez que se aleja con seguridad, Goku estira los brazos y comienza a recoger energía de todo lo que hay en la naturaleza, y una vez que se obtiene lo suficiente, lo concentra todo en su puño. Sin embargo, justo antes de que pueda disparar, Vegeta se recupera de la Bengala solar y lanza un Super Cañon Galick a Goku, cogiéndolo por sorpresa. Posteriormente, Goku toma toda la fuerza del ataque y pierde su energía para la Gekindama.
Agotado por la tensión de la acumulación de energía, Goku es incapaz de esquivar Vegeta durante mucho tiempo antes de que Vegeta le apriete y aplaste ambas piernas golpeándolas. Goku logra vengarse disparando la última de sus energías directamente al ojo derecho de Vegeta, dañándolo severamente. Furioso por la pérdida de la mitad de su visión, Vegeta agarra a Goku en sus manos y comienza a apretarlo hasta la muerte.